miércoles, 11 de julio de 2007

Atardecer en Calafell.

La tarde aquí tiene otra luz. Desde que vi el atardecer frente al mar en Calafell quise describirlo. Pero, ¿cómo expresar el color de esta luz? La tarde como símbolo poético de la melancolía aquí no habría tenido lugar porque una melancolía luminosa es antítesis de difícil transcripción a un sentimiento real. Y, sin embargo, el contemplar esta luz frente al mar produce un sentimiento lo más parecido a una alegre melancolía, como si una canción triste estuviera escrita en modo mayor. La luz de la tarde en Calafell es una sinfonía triste en modo mayor.

Calafell 1 de julio de 2007

1 comentario:

José del Rincón dijo...

Hola:
¿Has ido con Amadeo, como en los viejos tiempos?
Un abrazo, pedazo de poeta.